“Oh Jehová, de mañana oirás mi voz; de mañana me presentaré delante de Ti, y esperaré” (Salmos 5:3).
TESORO BÍBLICO:
Muchos creyentes fracasan en su vida cristiana por una simple razón: no tienen un tiempo íntimo con Dios. Fallan en comenzar el día con Jesús. ¡Y es tan simple! Se preguntan: “¿Por qué fracaso? ¿Por qué no tengo la victoria? ¿Por qué no entiendo?” Permítanos responder con otra pregunta: “¿Por qué no tiene un tiempo de quietud con Dios al comenzar el día, y saturar su alma con su presencia, y bañar su corazón con su Palabra?” Alguien dijo: “Cada mañana pon tus manos por un rato sobre la ventana de los cielos, y contempla al Señor. Y entonces, con esa visión en tu corazón, estarás fortalecido para enfrentar el día.”
PUNTO DE ACCIÓN:
¿Cuál es su disculpa para no tener un tiempo diario de quietud con Dios? ¿Qué puede hacer diferente para asegurarse de que esa sea su primera prioridad? ¿Necesita que alguien le ayude? Solicite esa ayuda. Pida oración. Sea responsable y tenga ese tiempo diario con Dios. Su vida cambiará para siempre.
PUNTO DE ACCIÓN:
¿Cuál es su disculpa para no tener un tiempo diario de quietud con Dios? ¿Qué puede hacer diferente para asegurarse de que esa sea su primera prioridad? ¿Necesita que alguien le ayude? Solicite esa ayuda. Pida oración. Sea responsable y tenga ese tiempo diario con Dios. Su vida cambiará para siempre.
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